UNA PLAGA MÁS SE SUMA A LA TORTURA QUÍMICA, POLIFARMACIA, ALUCINACIONES, DEPRESIÓN E INTENTOS DE SUICIDIOS DE JORGE GLAS
En las últimas horas el exvicepresidente Jorge Glas ha sido tendencia, esta vez su nombre suena en el caso Plaga que lleva a cabo la fiscalía dentro de la investigación de un red de corrupción que salpica al sistema judicial del Ecuador.
Durante la audiencia del caso Plaga, se dio a conocer que una computadora incautada a Soledad Padilla, exasesora de Jorge Glas, fue incluida como parte de la evidencia. Parte de la documentación fue liberada y en ella se encontró información detallada de los planes que tienen para destituir a la Fiscal General del Estado, así como estrategias para rebajar la pena del exvicepresidente.
Como si esto fuera poco también se revela un supuesto acuerdo suscrito por el expresidente de la Asamblea, Virgilio Saquicela y la asambleísta de la RC5 Pamela Aguirre para repartir cargos a favor de la bancada correísta.
La tarde de este 04 de septiembre, el CAL dio paso a la reactivación del juicio de la fiscal, una vez que el PSC y ADN acogieron la solicitud de la fiscal Diana Salazar que pidió se reactive el juicio político en su contra, una vez superado el riesgo por su embarazo.
El martes 03 de septiembre, el Comité Internacional por la libertad que abandera la causa de Jorge Glas, denunció que el exvicepresidente ingiere entre 42 y 45 pastillas al día como parte del tratamiento que recibe en la cárcel, La Roca en Guayaquil.
Según su médico internista, Alejandro Barreto, este exceso de fármacos habría resultado en un cuadro de polifarmacia, provocando un estado somnoliento, con problemas de memoria, alucinaciones, sicopatía, depresión severa, estado de ansiedad e intentos de suicidio.
Esta no es la primera vez que se pone sobre la mesa, el estado de salud de Jorge Glas, como argumento que permita su salida de prisión.
Meses atrás se dijo que Glas estaba en ayuno desde hace 89 días, superando así, al mismo Jesucristo, además que había sufrido mordeduras de ratas, y que intentó suicidarse al ingerir 60 pastillas, por lo que fue llevado a una casa de salud.
Hasta ahora las versiones han sido desmentidas por el gobierno, que asegura que recibe atención médica oportuna, mientras su celda cuenta con las necesidades básicas, que incluyen colchón y almohada ortopédica.
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